La falta de habilidades sociales es una de las principales fuentes de malestar en la población sana, y es también una de las principales causantes de psicopatologías. Las habilidades sociales son un repertorio de formas de funcionar que los humanos tienen para relacionarse. El entrenamiento en habilidades sociales forma parte de muchos de los programas de psicoterapia actuales. Hoy os hablamos concretamente de por qué nuestra disciplina, el arteterapia, es especialmente interesante para mejorar las habilidades sociales.
Un ser social en una sociedad individualista
El ser humano es, probablemente, el más social de todos los animales del planeta. Las relaciones sociales es lo que nos hace fuerte como especie. Es lo que nos ha dado el poder que tenemos sobre el planeta. Sin embargo, las sociedades modernas parecen estar olvidando esto. En las últimas décadas (o siglos) nos hemos vuelto extremadamente individualistas.
Cada vez tenemos más dificultad para apoyarnos en la familia, en los amigos y en estas pequeñas comunidades que, antaño, eran el soporte de todo individuo.
La educación cada vez recae menos en los padres y más en la escuela y los medios de comunicación. Dado que la atención es menos personalizada, los niños tienen menos supervisión y menos modelos directos para aprender a socializarse con los adultos.
Consecuencias de la falta de habilidades sociales
Esto está teniendo grandes implicaciones en el desarrollo emocional y social de las nuevas generaciones. La falta de habilidades sociales y asertividad es cada vez más común, lo cual genera altos niveles de malestar. Las personas con estas habilidades reducidas tienden a aislarse. Cuando intentan relacionarse, a menudo se sienten incapaces de expresarse y acaban en conflicto con las otras personas. Las personas que no tienen un buen vínculo y apoyo social tienen más probabilidades de tener trastornos del estado de ánimo como depresión y ansiedad.
Psicoterapia y entrenamiento en habilidades sociales
Es por esto que casi todos los programas psicológicos incluyen entrenamiento en habilidades sociales. El objetivo de este entrenamiento es que la persona aprenda a comunicar sus necesidades, así como a escuchar la de los demás. Estos programas ayudan al cliente a relacionarse de forma más satisfactoria y a buscar el apoyo que necesitan en sus vínculos sociales.
Si la ansiedad social es muy elevada, se recomienda empezar con terapia individual, hasta que la persona se sienta capaz de interactuar con otros individuos. Una vez la ansiedad social es manejable, es recomendable trabajar en terapias de grupo para que los aprendizajes sean más prácticos.
Beneficios del arteterapia para la mejora de las habilidades sociales
Como ya comentamos en un artículo anterior, la creación en grupo tiene muchos beneficios. Aquí os hablamos de aquellos referentes a las habilidades sociales:
- Es una fuente de vivencias emocionales positivas. Crear en grupo suele relacionarse con el juego y se suele vivir de forma positiva.
- Aumenta las interacciones espontáneas. Las personas tienen menos miedo de relacionarse, ya que tienen algo de lo que hablar.
- Reduce el miedo a la interacción y, por tanto, la ansiedad social. Relacionado con el punto anterior, ya que la opinión se suele referir a aspectos artísticos y éstos se consideran subjetivos, las personas tienen menos miedo a expresar su opinión.
- Mejora la autoestima. La creación en general aumenta la autoestima porque aumenta la sensación de capacidad de la persona. Además, el hecho de relacionarse de forma más satisfactoria dentro del grupo tiene también efectos positivos en ésta.
- Aumenta en interés social. Cuando una persona crea algo, aumenta el interés social en ella, facilita los halagos y el reconocimiento por parte de los demás. Esto tiene efectos positivos en la persona que recibe los halagos, pero también en la que los hace.
- Fomenta el sentimiento de pertenencia a un grupo. La creación en grupo fomenta el vínculo entre los participantes ya que genera formas de interacción sanas.
- El aprendizaje es implícito, lo cual mejora sus resultados. Los aprendizajes se realizan de forma espontánea, lo cual reduce la ansiedad de aprendizaje. La persona no piensa que está siendo “entrenada”, sino que está gozando de la actividad.
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