Es importante que cada persona exprese de alguna manera los problemas que tiene en su vida diaria para exteriorizar sus preocupaciones, deseos y miedos. La escritura terapéutica nos ayuda a tomar más conciencia de la realidad y nos ayuda a liberar la ansiedad y estrés mental. Descubre con este artículo algunos de los beneficios más conocidos de la escritura terapéutica.
¿Qué es La escritura terapéutica?
El pensamiento funciona de una forma instantánea y con un lenguaje desorganizado. En ocasiones nos hace sentir desbordados y con ansiedad mental. De hecho, a veces le damos mil y una vueltas a una misma idea sin sacar nada en claro. Para remediar esta sensación de falta de control mental, la escritura terapéutica nos es muy útil.
La escritura terapéutica se usa mucho en arteterapia. Es un método de escritura que nos sirve para expresar nuestras vivencias, emociones y pensamientos relacionados con nuestra vida. Podemos tratar infinitud de temas como pueden ser pueden ser debates internos que mantengamos con nosotros mismos, valoraciones sobre nuestra vida, expresión de nuestros deseos y sueños vitales o conversaciones pendientes con otra persona.
La escritura terapéutica es un método de escritura que nos sirve para expresar nuestras vivencias, emociones y pensamientos relacionados con nuestra vida.
Beneficios de la escritura terapéutica
Utilizar la escritura de modo terapéutico nos pude ayudar de forma beneficiosa en diversos ámbitos de nuestra vida. Veamos los 5 beneficios más importantes:
1. Mejora la expresión
Cuando escribimos, utilizamos un discurso más sofisticado y detallado a las que usamos normalmente cuando hablamos. De hecho, narrar nuestros pensamientos nos obliga a pararnos y a tomar un tiempo para adentrarnos a nuestro mundo interior. Eso nos ayuda a construir una base para describir lo que pasa por nuestra cabeza de forma más estructurada. En consecuencia, entendemos mejor y a organizar el pensamiento. Nos permite separar el grano de la paja y tomar conciencia de nuestra realidad de una forma más efectiva.
2. Reduce la ansiedad y el estrés
A veces, cuando tenemos que contar un problema a alguien de confianza, evitamos algunos detalles por vergüenza o por miedo. Por eso, desarrollar por escrito nuestras vivencias y emociones nos sirve para desahogarnos emocionalmente. Nos aporta la privacidad que a veces necesitamos y nos da la libertad de expresarnos sin preocuparnos por la reacción de los demás.
Para beneficiarnos, es imprescindible que nos permitamos una libre expresión sin remordimientos y que seamos francos y directos conectando verdaderamente con nuestra situación. Ello nos llevará a relajarnos mentalmente y nos ayudará a soltar emociones que a veces quedan estancadas como la tristeza, la rabia, el miedo o la vergüenza.
3. Aumenta la sensación de bienestar corporal
Muy a menudo nuestro “nonstop” de ideas puede transformarse en tensiones y dolores físicos derivados de esta ansiedad y preocupación mental. Debido a su efecto desestresante, sacar afuera todo aquello que llevamos en la mente nos ayudará a desbloquear los pensamientos obsesivos y circulares. Esto, a su vez, reduce la sintomatología ansiosa tal como dolor de cabeza, migraña, problemas estomacales o mareos, entre otros.
4. Mejora la toma de decisiones
El hecho de plasmar por escrito nuestros dilemas, miedos o nuestras preocupaciones nos otorga mayor distancia emocional ante las adversidades. Este distanciamiento emocional nos permite observar nuestra vida con más perspectiva y, con ello, realizar mejores elecciones en el futuro.
También nos ayuda a cambiar patrones de pensamiento desadaptativos que, a veces, nos pueden llevar a conclusiones poco adaptativas y, por ende, nos llevan a malas decisiones.
5. Ayuda a superar los malos momentos
Las personas que han sufrido traumas muy dolorosos como un divorcio, la muerte de un cónyuge o un trauma sexual infantil, no suelen hablar de ello. A menudo piensan que exponer este tipo de vivencias ante otras personas puede ser humillante o embarazoso. En otras ocasiones no lo hacen porque temen que será muy doloroso para la persona a quien se lo cuenten. Por lo tanto, una buena manera de poder expresarlo de forma íntima y privada pude ser mediante la escritura terapéutica. De hecho, existen estudios científicos que avalan que las personas que relatan sus experiencias traumáticas por escrito superan antes los malos momentos que las que no lo hacen.
Una buena manera para expresar nuestros peores momentos de forma íntima y privada pude ser mediante la escritura terapéutica.
Si te ha entrado el gusanillo prueba con estos 5 sencillos ejercicios para el día a día y descubre los beneficios de la escritura terapéutica de primera mano.